En la ciudad de Pilar, inició el Centro de Formación Juana Cañete, dirigido a mujeres y juventudes del departamento de Ñeembucú, con el objetivo de expandir conocimientos, compartir el análisis crítico y la reflexión en temas relevantes sobre violencia basada en género, derechos de las mujeres y organización colectiva. Este Centro, que se realizará también en los próximos meses en Misiones, Itapúa y Guairá, se desarrolla en el marco del proyecto “Mujeres del sur en acción”, ejecutado por la organización Kuña Róga, en colaboración con la Asociación de Investigación y Especialización sobre Temas Iberoamericanos (AIETI) y financiado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).

Las participantes, provenientes de diferentes distritos del departamento, recibieron una Guía de capacitación que contiene cinco módulos y es una caja de herramientas teóricas y prácticas. Esta guía se utilizará a lo largo del proceso de formación, proponiendo nuevos enfoques y dimensiones desde los estudios feministas y de género. En la primera jornada, facilitada por Ana Galeano, se abordó el panorama integral de la problemática de la violencia basada en género y se brindaron orientaciones prácticas para el tratamiento de situaciones de violencia, desde el acompañamiento en la comunidad.

Los temas desarrollados permitieron a las participantes destacar la relevancia de promover vínculos y redes en el abordaje contra la violencia de género, y mostraron una gran apertura, creando un ambiente donde pudieron reconocerse y conectar con sus experiencias en torno a la violencia.

“Uno de los puntos clave destacados fue la comprensión de la violencia no como un problema aislado, sino como un producto e instrumento del patriarcado. Esta perspectiva permitió a las compañeras vincular la violencia a nivel colectivo, afectando a mujeres, comunidades y niñeces. Además, se enfatizó la importancia de un abordaje colectivo y amoroso para acompañar a las mujeres a salir de ciclos de violencia. Se reconoció que este proceso no es solo una decisión individual, sino que requiere un conjunto de condiciones facilitadas por redes de apoyo, amigas y familiares. Este enfoque busca reimaginar una vida fuera de la relación violenta, destacando el papel esencial del acompañamiento colectivo”, explicó la coordinadora del proyecto, Miyuki Shimanaka.

El Centro de Formación lleva el nombre de la socia fundadora de Kuña Róga, Juana Cañete, quien motivó a otras mujeres hace 27 años a crear un espacio de acogida a mujeres que sufrían violencia. Hoy, a través de este Centro de formación, se busca traducir este espíritu inicial en acciones concretas, consolidando un espacio donde las mujeres puedan encontrar apoyo y construir juntas un futuro libre de violencia.